Como hemos comentado en la nota anterior es imprescindible haber realizado “ensayos previos” a la salida real, para evitar que este momento tome a nuestra mascota de sorpresa y aparezcan muchos de los problemas de conducta que solemos observar cuando el apego ha sido más del habitual y la capacidad de gestionar los momentos a solas quedo truncada.
- ¿Cuál sería la mejor manera de hacer una salida?
- ¿Qué deberíamos tener en cuenta en este momento?
- ¿Cómo hacemos de una salida, un momento placentero y con menos problemas?
5 ideas para que nuestras salidas sean un éxito!
1. Hagamos ensayos
Como ya hemos mencionado, la mejor manera de que algo resulte exitoso, seria haber hecho varios ensayos y comprobado que el resultado es el esperado o aún mejor.
2. Paseo de calidad
Al salir del hogar deberíamos tener en cuenta que nuestra mascota haya podido vaciar algunas o gran parte de sus motivaciones internas, que quiero decir con esto, que debería haber tenido un “paseo de calidad”, debería haber tenido algún momento de juego, conductas de obediencia como el simple hecho de sentarse y esperar para poder acceder a su ración de alimento (esta conducta por simple que resulte, es una conducta que puede enseñarles y ayudarlos a controlar su ansiedad entre otras cosas).
3. Dejar algún juguete
Dejar algún juego, que podría ser uno de esos juguetes que se rellenan con alimentos y/o snacks por dar un ejemplo, tal vez realizar alguna actividad de olfato previo a retirarnos, o dejarla para que se entretenga en nuestra ausencia.
4. Un ambiente enriquecido
Pensemos siempre que cuanto más enriquecido este el ambiente, menos probabilidades tendremos de que se aburra y tenga una mala percepción de nuestra ausencia. Un ambiente enriquecido dará bienestar, estimulación mental, menos problemas, más autonomía y muchísimo menos estrés.
5. Un ingreso más calmo
Otro consejo muy útil, o que en mi caso me funciona de maravilla, es que mi llegada a casa no sea una gran fiesta apenas atravieso la puerta, como todos ustedes los extraño y deseo llegar a mi hogar para ver que están bien, pero me tomo mi tiempo para entrar lo más tranquila posible, deshacerme de mis cosas, cartera, abrigo, llaves, higienizarme, para luego poder saludarlos, con el tiempo esto genera que nuestra llegada sea un momento más calmo y con menos expectativas, generando menos ansiedad.
Olimpo_canino
Nancy N. Domínguez
Adiestradora de canes (Escuela adiestramiento canino FAC. Cs. Veterinarias -UBA-)
