La cocina marginal tuvo su espacio

Las expresiones gastronómicas de los grupos silenciados y discriminados. El no comer y la lucha por el comer. Qué y cómo comen los piqueteros, los cartoneros, los enfermos mentales, los presos y los travestis. Bajo estos conceptos, el pasado  14 de noviembre se realizó la Jornada “Cocina sin Receta”, organizada por la Comisión para la Preservación del Patrimonio Histórico Cultural (CPPHC) del Ministerio de Cultura del GCBA.

En ella, expusieron sus costumbres gastronómicas integrantes de la agrupación Movimiento Tupac Amarú en el Frente Popular Darío Santillán; integrantes de radio “La Cantora”, presos y presas en cárceles argentinas e integrantes de organizaciones sociales; pacientes e internos de neurosiquiátriocos. Responsables de la radio “La Colifata”; integrantes del Movimiento Nacional de Trabajadores Cartoneros y Recicladores (MNT-CAR);  Claudia Pía Baudracco, Asociación Travestis Transexuales Transgénero Argentinas (ATTA) y Sonia Sánchez (autora del libro “Ninguna mujer nace para puta”).

Desde el "guiso tumbero", un poderoso potaje de porotos, verduras y restos de carne, al menú queer. La Secretaria General de la CPPHC, la licenciada Leticia Maronese, estuvo a cargo de la apertura. “Analizar las costumbres de los grupos que integran el tejido social argentino permite conocerlos más y la construcción social que rodea al hecho gastronómico de comer es parte de esas costumbres”, analizó por su lado Víctor Ego Ducrot, periodista especializado en temáticas gastronómicas e integrante de dicha Comisión.

El cierre de este encuentro fue el momento para la degustación. Gracias al aporte de la Tupac Amarú, la noche cerró con una generosa ronda de empanadas y vino tinto, entre otros platos.