El pasado jueves 26 de noviembre jóvenes representantes de nueve comunidades extranjeras se reunieron por primera vez en la sede de la Federación de Asociaciones Calabresas en Argentina, con el fin de comenzar a articular esfuerzos y movilizar recursos para acompañar el desarrollo de las comunidades extranjeras en la Ciudad de Buenos Aires. 

El encuentro, que estuvo propiciado por la Unidad de Coordinación de Políticas de Juventud (UCPJ) y por la Dirección General de Relaciones Institucionales del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, fue inaugurado por Ezequiel Langan, Director de la UCPJ y por Irma Rizzuti, asesora de la Secretaría General del Gobierno de la Ciudad. 

Con más de 40 participantes, estuvieron representadas las comunidades extranjeras de Italia, Corea, China, Alemania, España, Polonia, Grecia y Hebrea, como así también el Club Europeo. 

Bajo la moderación de Marcelo Urresti, los jóvenes presentes debatieron acerca de las necesidades, problemáticas y objetivos en común que tienen hoy las nuevas generaciones de las comunidades extranjeras de la Ciudad de Buenos Aires. 

Entre las temáticas tratadas sobresalieron las siguientes: integración, multiculturalidad, identidad, salud, educación, idiomas y trabajo entre otras. Se propuso la creación del primer foro de jóvenes de comunidades extranjeras y se comenzaron a delinear actividades en conjunto a llevar a cabo para el año que viene. Entre ellas, teniendo como marco al bicentenario de nuestro país, se comenzó a pensar en la organización del Primer Encuentro Internacional de Comunidades Extranjeras. 

Los jóvenes presentes coincidieron todos en destacar la gran importancia de este tipo de encuentros, no solo porque a través de los mismos será posible la creación de una red de comunidades extranjeras a partir de la cual se genere una sinergia de acciones, información y comunicación sino también porque son conscientes de que ellos son las nuevas generaciones que forjarán el destino de la Ciudad y este tipo de actividades implica que la diversidad esté conectada, que las individualidades se enriquezcan y que una nueva realidad social, donde las diferencias no sean un obstáculo sino una oportunidad, sea posible.