Con una sonrisa fresca y el placer de haber devorado un matambrito a la pizza junto a su novio, amigos y amigas, Celeste Meccia, la capitana de la selección argentina de Beach Handball, aparece en el Instagram Live de #DeportesBA para un nuevo "Mano a mano" junto a Juan Martín Rinaldi.
No es un día más. El 26 de mayo es su cumpleaños, el 34. Y sus fans lo saben muy bien. Apenas aparece en pantalla, los mensajes empiezan a caer, uno a uno, en la pantalla de todos los celulares y computadoras. Celeste aprovecha este puente digital y agradece todos los saludos.
Su vida transcurre en Italia, en la ciudad de Ferrara, donde juega en el Club Ariosto al handball indoor, pero la pandemia mundial la tiene encerrada como a millones de personas: "Salgo poco, entreno en casa donde tengo de todo, pero los otros días salí a hacer unas compras y no podía creer la cantidad de gente que había en la calle. De a poco se está volviendo a la vida normal", relató la jugadora iniciada en el mundo del handball desde adolescente en Argentinos Juniors.
El amor por este deporte nació de tanto ir a ver a papá Jorge, un reconocido formador y entrenador, aunque deja en claro que su padre no la influenció en su decisión: "Sola, de tanto acompañarlo, un día le dije a mí viejo que quería jugar al handball". Así nació todo.
Fueron diez años en el Bicho de La Paternal, pero un día, en el 2007, en un partido ante Vélez, una decisión cambió su destino: "Termina el partido, viene el entrenador de Vélez y me dice que se estaba formando un equipo para jugar Beach Handball y que me quería en el equipo. Acepté y acá estamos. Hoy si me dan a elegir entre los dos, elijo el Beach", asegura más que convencida.
Crédito: Play Handball
Y esa elección tiene un por qué. "Chalín", como se la conoce a Celeste, lo explica: "El Beach Handball es un deporte muy creativo, todo el tiempo podés inventar algo. Además el clima de fiesta y de alegría que se vive afuera es maravilloso. Te enamora. Lo más duro es entrenar en invierno, a veces no sentís los pies. Pero lo bueno que tiene este deporte es que cualquiera le puede ganar a cualquiera, te dormís un segundo y fuiste por más potencia que seas".
Después de varios años de entrenamientos en lugares que tenían hasta piedras debajo de la arena todo mejoró. En el Cenard y el Parque Sarmiento se construyeron canchas de excelencia, las jugadoras mejoraron su nivel, la organización fue en aumento y así comenzaron a llegar a punto a todo tipo de torneos: Mundiales, Sudamericanos (que le ganaron a Brasil en 2018) y hasta en los Juegos Nacionales de Playa, donde Celeste fue figura del equipo de CABA que se consagró campeón en Rosario 2018 y Puerto Madryn 2019.
El Beach Handball tuvo su explosión en los Juegos Olímpicos de la Juventud Buenos Aires 2018. Las chicas argentinas se llevaron la medalla dorada y provocaron una revolución nacional más allá de las fronteras del handball. Diarios, revistas, programas de radio y TV no pararon de hablar de ellas, pero en especial en las redes sociales, su mundo natural. Las jóvenes Kamikazes se habían transformado en un fenómeno impensado donde miles de chicos y chicas hacían fila durante horas y muchos se quedaban afuera en cada partido. No había lugar para todos y todas.
Y fue ahí, durante esos Juegos del 2018, donde se hizo popular el nombre de Las Kamikazes, el apodo oficial del equipo femenino de Beach Handball. Celeste, que siguió el torneo juvenil desde Europa, es palabra autorizada para hablar sobre este particular nombre, porque fue de las primeras que lo usó.
Crédito: Isabella Gandolfi
"Estábamos en el Mundial de Hungría de 2016 y con nosotras viaja siempre Nico Bavoleo, un periodista que nos sigue a todos lados. Después de ganarle a Australia, bajo la lluvia, en el partido por el séptimo puesto, Nico vino y nos dijo 'ustedes necesitan un nombre fuerte que las identifique'. Tiró Kamikazes, nos gustó y quedó a pesar de alguna reticencia de la Confederación", contó la capitana.
Ya sobre el final de la charla, cuando Instagram anuncia que el Live de una hora está por terminar, Celeste dejó en claro qué es el deporte para ella: "Todo lo lindo lo tengo gracias al deporte. Me dio la vida. Valores, amistades, premios, alegrías y hasta mi novio. Todo eso y muchas enseñanzas me dio el handball en estos 34 años".
