Viernes 16 de Julio de 2021

La separación y el camino de los residuos

La gran cantidad de residuos que generamos tiene un impacto negativo en las ciudades y el entorno natural. Disminuir esa cantidad es un paso clave para preservar nuestro planeta.

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Uno de los hábitos fundamentales para contribuir con el cuidado del ambiente es la separación de los residuos en origen que podemos promover donde nos encontremos. El principal objetivo de esta práctica es reducir la cantidad de residuos que se destinan al relleno sanitario y facilitar la labor de los/as recuperadores urbanos/as, para que puedan enviar el material reciclable a la industria.

La separación en origen, la reutilización creativa y el consumo responsable son conceptos relacionados entre sí. La gestión eficiente de los residuos y los materiales reciclables permite que podamos aprovechar una gran cantidad de elementos para elaborar juguetes, adornos, entre otras cosas. Al adoptar estos hábitos, evitamos que se consuman bienes naturales que se destinan a la producción industrial, contribuimos a reducir las emisiones de gases que generan el cambio climático y ahorramos en costos de energía e insumos.

El Día Internacional del reciclaje se festeja cada 17 de mayo desde 1994.

Para conocer más sobre separación, reciclaje y cuáles son los materiales reciclables, ingresá y descargá el siguiente folleto. (/sites/default/files/media/document/2019/03/18/015b5c36880dd3c55eef7d580d5218f764e8c543.pdf)

El camino de los residuos

Los residuos sólidos urbanos (RSU) son los desechos comunes de los hogares, escuelas, oficinas, comercios, bares, barrido de calles y otros similares. Todas las actividades cotidianas que realizamos generan residuos, que se pueden separar en reciclables y basura. En la Ciudad de Buenos Aires se usan los colores verde y negro para identificar cada categoría respectivamente. Una vez separados los residuos no reciclables, y luego de colocar la bolsa en el contenedor negro, pasa el camión recolector a retirarlos.

De allí los lleva a las Estaciones de Transferencia de CEAMSE (ubicadas en los barrios de Pompeya, Flores y Colegiales). Luego los residuos se transportan hacia los Complejos Ambientales, que son centros de tratamiento y disposición final, ubicados en distintos puntos de la Provincia de Buenos Aires. Éstos constituyen un conjunto de instalaciones donde se llevan a cabo distintas alternativas para la valorización y el tratamiento de residuos.

Para conocer más sobre el trabajo de CEAMSE, ingresar acá.

El reciclaje en la Ciudad

Todo material que no se considere basura puede ser aprovechado como materia prima para otros fines. Los materiales reciclables deben depositarse secos y limpios en las campanas y contenedores verdes, para iniciar su propio camino.

Uno de los roles fundamentales dentro del sistema de reciclaje lo cumplen las y los recuperadores urbanos. Actualmente en la Ciudad hay 12 cooperativas y 6.500 trabajadores entre recuperadores urbanos, promotoras y operarios de logística y de centros verdes. En esas cooperativas reciben los materiales reciclables que se les entrega en mano y los que vecinos y vecinas depositan en contenedores verdes, campanas verdes y puntos verdes. Todo el material que se recolecta es destinado a los 16 Centros Verdes, donde se los clasifica por tipo y condición, se los pesa, enfarda y prepara para su venta y reinserción dentro del circuito productivo como materia prima.

En la Ciudad también existe el primer centro de Argentina que reúne cinco plantas de tratamiento de residuos y un centro educativo. Ubicado en el barrio de Villa Soldati, se reciben materiales reciclables que se distribuyen en alguna de las plantas: residuos áridos, de poda, orgánicos, plásticos PET y una planta automatizada de residuos secos o reciclables. Dependiendo del tipo de residuo, el tratamiento varía, sin embargo, el principal objetivo es siempre revalorizar el residuo, transformándolo para reintroducirlo en diferentes industrias.

Para realizar una visita virtual, ingresar acá.

La situación mundial y la crisis del sistema productivo

La gestión de la enorme cantidad de residuos generados en las ciudades es un problema crítico que enfrentan los distintos gobiernos. Según el Banco Mundial, en 2025 los residentes urbanos estarán generando 1,42 kilos de basura por día, lo que se traduce en enormes volúmenes de residuos al año.

En este contexto, es de extrema relevancia la búsqueda de una solución eficaz para la gestión y el tratamiento sustentable de los residuos, que los conciba como recursos y no como basura.

Los gobiernos que lograron implementar políticas más avanzadas y eficientes en este sentido, instalaron un paradigma que vincula la generación de residuos con el beneficio post tratamiento.

El sistema productivo actual es lineal. Esto significa que se obtienen los recursos para la elaboración de productos y servicios; se producen y distribuyen; se venden y consumen, y luego esos productos y sus embalajes son tratados como basura y se disponen en el relleno sanitario. Este sistema está en crisis ya que no puede operar infinitamente en un planeta con recursos finitos.

El nuevo modelo que se intenta instalar se basa en un sistema de economía circular donde no existe la basura, sino que todo se reutiliza y recicla en búsqueda de una solución de largo plazo. Se propone que la industria y los sistemas productivos se asemejen a la naturaleza, imitando su carácter cíclico para lograr mayor efectividad. Los productos deben concebirse de manera que su final sea como el de un elemento natural que, cuando muere, inicia un nuevo ciclo de vida.

Escuelas Verdes y la Educación Ambiental

Desde hace más de 10 años y a través del plan de Gestión Integral de Residuos, Escuelas Verdes promueve el consumo responsable, la separación en origen y la recolección diferenciada en las escuelas de la Ciudad.

El programa brinda recursos y propuestas educativas con actividades lúdicas para combinar el juego con el aprendizaje, lo que permite incorporar la separación como un hábito sustentable. Para conocer más, ingresá al sitio web.