Lunes 10 de Mayo de 2021

Video explicativo para reducir, reutilizar y reciclar los residuos

Es importante que aprendamos cómo generar menos basura. Es la mejor manera de tener una ciudad limpia y sustentable. Pero para lograrlo la ciudad te necesita a vos. ¡Compartí el video y empezá!

Compartir en Redes

¿Sabías que la Ciudad de Buenos Aires genera una cantidad de basura equivalente a 1.300 elefantes. Eso es muchísimo. Y no solo ocupa espacio, sino que también contamina. Para reducir su impacto ambiental, estos residuos son enterrados en rellenos sanitarios. Por eso es importante que aprendamos cómo generar menos basura. Esa es la mejor manera de tener una ciudad limpia y sustentable. Esto es posible, pero para lograrlo la ciudad te necesita a vos.

Es fácil, acordate de las famosas 3 r: reducir, reutilizar y reciclar

Vamos con la primera. Reducir es tratar de consumir solo lo necesario para así generar menos residuos. Una buena forma de empezar a reducir es elegir productos sueltos, es decir, que no utilicen envases. Por ejemplo, en vez de comprar las manzanas en una bandeja envuelta en plástico, podés llevar una ecobolsa para guardarlas. De esta manera después no vas a tener ningún envase para tirar cuando vuelvas a tu casa.

La segunda r es reutilizar. Es decir, darle un nuevo uso a algo que pensabas que ya no servía. Hay muchos ejemplos de reutilización. Una botella que se convierte en florero, una lata que se transforma en lapicero y hasta un cajón de verdura que sirve como stand.

La última de las 3 r es reciclar. O sea, aprovechar esos materiales que ya no sirven para transformarlos en materias primas con las cuales fabricar nuevos objetos. Por ejemplo, el plástico de un balde roto puede reciclarse para transformarse en el plástico con el que se fabrica un juguete nuevo.

Gracias al reciclaje el 80% de los residuos puede dejar de ser basura para transformarse en recursos.

Pero para que esto ocurra, primero necesitamos que separes los residuos en tu casa. Es muy fácil. En el tacho negro van los residuos húmedos. Es decir, la basura. Restos de comida que ya no se pueden aprovechar y papeles y cartones sucios. También los vidrios rotos porque no se pueden reciclar. En el tacho verde, en cambio, van los materiales limpios y secos que se pueden reciclar: vidrios enteros, metales, plásticos, papeles y cartones.

¿Sabías que para producir una tonelada de papel hace falta talar 15 árboles?

En cambio, si separamos los carteles y cartones de la basura podemos usar esos materiales para fabricar nuevos libros y cuadernos y así no agotar nuestros recursos forestales.

¿Y sabías que el plástico puede tardar más de 600 años en desgradarse?

En realidad, nunca desparece del todo, ya que permanece en el ambiente en forma de partículas muy chiquitas y contaminantes llamadas microplásticos. Pero si vos reciclás tu botella de agua no sólo vas a evitar que ese plástico contamine, si no que vas a permitir que se transforme en algo nuevo. Por ejemplo, en las fibras que se utilizan para fabricar un buzo polar.

¿Y el vidrio?

El vidrio tarda por lo menos mil años en desaparecer. Pero si dejás tus frascos de vidrio en el tacho verde en vez de enterrarse con el resto de la basura podemos transformarlo por ejemplo en vasos nuevos.

El metal también es reciclable.

80 latitas por ejemplo alcanzan para fabricar una nueva rueda de bicicleta.

Además de colaborar con la reducción de residuos, reciclar también permite ahorrar parte de la energía que se utiliza durante la extracción de recursos. De esta manera, a través del reciclaje también ayudamos a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, principales responsables del calentamiento global y el cambio climático.

Solo con tu ayuda vamos a seguir reduciendo la cantidad de basura que se genera en la ciudad para lograr un ambiente sustentable para todos. Por eso, compartí lo que aprendiste con tus amigos y tu familia para que cada vez seamos más los que nos esforzamos por construir una ciudad verde.