Según cálculos realizados a partir del último Censo de Población de 2010, más de 1 millón de personas, entre vecinos de la Ciudad, del resto del país y turistas, circulan por el Microcentro porteño cada día, donde hay una gran concentración de oficinas y empresas. Para revertir el deterioro de la zona, hacerla más transitable y permitir que vuelva a ser un lugar de encuentro para los vecinos, desde la Dirección General de Regeneración Urbana, dependiente del Ministerio de Ambiente y Espacio Público, se viene implementando el Plan Microcentro.
Para lograrlo, el mismo incluye entre los trabajos, la renovación de las cuadras, como uno de sus ejes fundamentales, nivelando las veredas con la calzada, otorgando la prioridad de circulación a los peatones y permitiendo el paso de vehículos pero a una velocidad reducida.
De las 76 cuadras incluidas en el plan, ya se renovaron 71.
En lo sucesivo, queda la colocación de luminarias, árboles y bolardos, entre otros elementos. Además, continúan los trabajos en la calle Esmeralda.
Etapas de la nivelación
Primera
Fue entre noviembre de 2012 y septiembre de 2013. Se nivelaron 33 cuadras correspondientes a las calles Marcelo T. Alvear (entre C. Pellegrini y Av. Alem), 25 de Mayo (entre Tucumán y Rivadavia), San Martín (entre Viamonte y Rivadavia), Bartolomé Mitre (entre Av. R. S Peña y Av. Alem), Sarmiento (entre las avenidas R. S Peña y Av. Alem), Pasaje Ricardo Rojas (entre San Martin y la Av. Alem) y Reconquista (entre el Pasaje Rojas y la Av. Alem).
Segunda
Inició en noviembre de 2013 y continúa. Se nivelaron 38 cuadras más, correspondientes a las calles Maipú (entre Av. de Mayo y Marcelo T. de Alvear), Perón (entre Av. Alem y Carlos Pellegrini), Suipacha (entre Av. de Mayo y Marcelo T. de Alvear), San Martín (entre Viamonte y Santa Fe) y Esmeralda (entre Av. de Mayo y Av. Santa Fe).
Al finalizar el Plan habrá un total de 76 cuadras niveladas en todo el Microcentro.
Con el foco puesto en las personas y en el espacio público como lugar de encuentro, el Plan propuso una intervención integral de perspectiva multidimensional que incluye acciones espaciales, sociales, tecnológicas, económicas, culturales y ambientales, todas tendientes a la puesta en valor de las edificaciones y vías de circulación de la zona, la readaptación de sus sendas e infraestructura para facilitar su accesibilidad y el fomento de la sustentabilidad del área.
A partir de una gestión participativa con interacción público-privado, éste busca revertir los factores que llevaron al deterioro de la zona, para recuperar su carácter e importancia originales y permitir que vuelva a erigirse como un lugar de encuentro para sus ciudadanos.
