Miércoles 16 de Octubre de 2013

Francisco y su caridad diaria

En las últimas horas se conocieron historias que muestran la generosidad del Papa. Donó una moto Harley Davidson que le regalaron para ayudar a Caritas de Roma y también ayudó económicamente a una anciana que le habían robado.

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El Papa Francisco predica con el ejemplo. Hay miles de gestos, pero vale detenerse en dos que tuvo en las últimas horas. Uno, la donación que hizo a Caritas Roma de una moto Harley Davidson que le regalaron. “El dinero de su venta o subasta servirá para ayudar a reestructurar un comedor y albergue de pobres en Roma”, contaron fuentes vaticanas. Y también se habló de los 200 euros que le envío a una anciana, a quien le robaron en la ciudad italiana de Marghera, cerca de Venecia.

Un Papa a toda marcha

La poderosa moto se la regalaron hace algunos meses en ocasión de la celebración en Roma del 110 aniversario de la mítica casa estadounidense Harley Davidson. El Papa ofrecerá el dinero de la venta a Caritas de Roma, que lo dedicará a las obras de renovación de los comedores para los necesitados y el centro de acogida “Don Luigi Di Liegro”, en el centro de Roma.

El director de la Caritas de Roma, Monseñor Enrico Feroci, fue quien anunció esta iniciativa, que agradeció con estas palabras: “Es un regalo precioso que nos hace felices”.

Cerca de los ancianos

También se supo que Francisco envió, a través de la Secretaría de Estado, un cheque de 200 euros a una anciana que la estaba pasando mal y que le había escrito para contarle sus problemas. La señora en cuestión, de Marghera (noreste de Italia), le había escrito pidiéndole ayuda después de que le robaran la cartera, en la que llevaba 54 euros, que le habían prestado, mientras iba al hospital a visitar a su marido, gravemente enfermo.

El párroco Gianni Antoniazzi que conocía la señora fue quien recibió la carta del Vaticano con el cheque firmado por el limosnero Konrad Krajewski y con un mensaje en el que se le decía que "se trataba de una donación" del Papa Francisco. "He probado una gran emoción cuando he visto la carta. El papa Francisco no sólo sabe estar entre la gente comunicando de la mejor manera e infundiendo su esperanza sino que también se fía de las peticiones que le llegan", dijo el párroco a la prensa italiana.