La mayoría de los que siguieron el "Mano a mano" con Dady Gallardo, en el Instagram Live de #DeportesBA, se enteraron de un dato casi secreto: se llama Eduardo. "Solamente en el documento dice que me llamo Eduardo. Desde chico fui Dady y puedo decir que mi verdadero nombre es Dady, Eduardo no lo registro", le contó el entrenador de La Garra (Selección Argentina de handball femenino) a Juan Martín Rinaldi.
En cambio, lo que sí registra Dady, es cómo trabajar y rearmar la estrategia para que el actual aislamiento afecte lo menos posible a su equipo para el torneo Preolímpico que será clasificatorio para los Juegos Olímpicos Tokio 2021. La fecha pautada es marzo 2021. Y mientras los equipos europeos comenzar con los entrenamientos, las chicas de La Garra se entrenan en sus casas y por Zoom. "Nuestros rivales en el Preolímpico ya están volviendo y eso nos juega en contra", aseguró Gallardo.
Otro hecho que registra y tiene muy fresco en su memoria son los Juegos de Londres 2012 en los que participó con Los Gladiadores, el equipo masculino de handball: "Estar en un Juego Olímpico es como estar en Disney para un nene. Fue el momento más maravilloso de mi vida y nunca se me va a borrar de mi cabeza. Para eso me preparé y trabajé toda mi carrera como entrenador", recordó este fanático de River que asegura que haber tenido “primero el carnet de River que el DNI”.
La historia de Dady también tiene otros hechos que lo marcaron y mucho. “Iba al colegio Don Bosco y a los 12 años tuve un accidente de moto muy grave donde casi pierdo una pierna. Lloraba y decía: `¿Por qué a mí?’. Pero un día me agarró un cura y me dijo: '¿Por qué te victimizas? ¿Pensás llorar toda tu vida?'. Eso me marcó a fuego. Ahí me puse de pie y salí adelante. Por eso, hasta el día de hoy, lo remarco como un estilo de vida. Cuando pasa algo malo se soluciona y listo. Hay que ponerse de pie y a seguir adelante", enfatiza.
Y vaya si lo hizo. Fiel a sus sentimientos, pocos años después de ese accidente, arrancó su carrera como jugador, pero se retiró joven. Su último partido fue a los 25 años. Y enseguida se puso el buzo de entrenador en… River. La tenía muy clara: "Me gustaba más ser entrenador que jugador". Y mal no le fue.
Al poco tiempo llegó la oportunidad de dirigir la selección. El primer gran logro fue el 12º puesto en el Mundial. Sí, el puesto 12º se había transformado en la mejor ubicación histórica para un seleccionado nacional. Además, en ese torneo, nacieron Los Gladiadores. "Ellos fueron la piedra fundamental para el crecimiento del handball en todo el país", destacó el DT.
A Dady Gallardo el handball le dio muchas satisfacciones: títulos panamericanos, participaciones en mundiales y Juegos Olímpicos, pero también alegrías como el día que conoció a Lionel Messi: "En el 2013 fuimos a jugar el Mundial en España y nos tocó ir a Barcelona. El día previo al debut hicimos cambiar al plantel para ir a entrenar y los llevamos de sorpresa al entrenamiento del Barcelona. Ahí los chicos se sacaron fotos con Messi y sinceramente nos sorprendió lo informado que estaba sobre el handball. Fue un momento inolvidable para todos", recordó.
El deporte y la vida de club son dos características muy marcadas en su vida. "Yo me formé en un club y, más allá de River, todo club, grande, chico o mediano es muy importante para el desarrollo de un niño o niña. El club es contención. El club marca un sentido de pertenencia que no te lo da nada. Por eso quiero remarcar que el rol de los clubes es fundamental", destacó Eduar…, perdón Dady, el hombre que sueña ir otra vez a su Disney, el que no va a parar, aunque sea por Zoom, hasta conseguir los pasajes para Tokio 2021.
