La pandemia trajo consigo nuevas tareas y desafíos para los integrantes del Cuerpo de Bomberos y los agentes de Emergencias de la Ciudad. Si bien se produjo una disminución en algunas intervenciones como los accidentes de tránsito, surgieron también nuevas actividades relacionadas con la circulación del virus, que conllevaron cambios en las rutinas, protocolos y una preparación constante por parte del personal.
En la actualidad, los Bomberos de la Ciudad colaboran con el SAME en el descenso y traslado de pacientes sospechosos y positivos de Coronavirus.
En cuanto se informa que la persona presenta síntomas compatibles con la infección por Covid-19, los bomberos se equipan con trajes de protección personal y despliegan una serie de procedimientos estandarizados.
Pero sin duda, la Brigada de Emergencias Especiales (BEE) de los Bomberos de la Ciudad es la unidad que encabeza hoy el combate del virus y la exposición permanente a sus riesgos. La BEE interviene en emergencias con riesgos biológicos, químicos, radiactivos y hasta nucleares, en estos casos en coordinación con organismos federales.
Los equipos de la Brigada empezaron a estudiar el comportamiento de la pandemia varios meses antes de su llegada a la Argentina y desde diciembre comenzaron a capacitarse en protocolos internacionales de actuación. Hoy prácticamente la totalidad de sus intervenciones están abocadas al combate del virus.
La BEE es convocada por la Policía de la Ciudad, el SAME y otros organismos para la descontaminación de materiales, vehículos e instalaciones expuestos al Coronavirus. También intervienen en la desinfección del propio personal de Bomberos que haya estado en contacto con el Covid-19.
Cada operativo de la BEE comienza con una evaluación de las exigencias de la emergencia y la determinación del tipo de traje a utilizar.
"Agudizamos los protocolos de seguridad y de protección personal, cómo colocarnos y sacarnos la ropa, y las barreras mínimas acerca de cómo ingresar y salir de las zonas contaminadas después de analizar cada situación puntual" destaca Christian Bello, Jefe de la Brigada.
Finalizada la descontaminación , la tarea aún no termina, ya que es fundamental el procedimiento para quitarse los trajes. Se establecen distintas zonas con los colores de un semáforo. Los miembros del equipo que estuvieron en contacto con el coronavirus (zona roja o caliente) deben desinfectarse en una pileta (zona amarilla o tibia) provista de ducha, hipoclorito de sodio y cepillos, pasados siempre con movimientos hacia abajo y asistidos por personal que no haya estado en la zona anterior. Recién en ese momento pueden transitar sin riesgos por la zona libre de virus (verde o fría) y descartar sus trajes.
Además de estas tareas específicas, los equipos de la Subsecretaría de Emergencias de la Ciudad trabajan en la prevención y concientización durante el aislamiento social, preventivo y obligatorio. El personal de Bomberos y de las Direcciones Generales de Defensa Civil, Guardia de Auxilio y Logística, recorren distintos barrios charlando con los vecinos y recordándoles la importancia de evitar aglomeraciones, de mantener la distancia social, usar correctamente el tapabocas y adoptar las medidas de higiene necesarias para minimizar los contagios.
Esta presencia se hace extensiva a los parques y plazas de la Ciudad durante las salidas recreativas de los fines de semana y las horas habilitadas para el ejercicio físico, colaborando con los controles desplegados por el resto de las fuerzas de seguridad.
