El jefe de Gabinete porteño, Felipe Miguel, participó hoy de la inauguración de la sucursal número 82 del Banco Ciudad, que está ubicada dentro del edificio del Ministerio de Desarrollo Humano y Hábitat en Villa Lugano, el cual fue inaugurado en julio de este año en el predio donde estaba el Elefante Blanco.
"Es un paso más en la consolidación de nuevas oportunidades para el desarrollo de la zona sur", expresó Miguel.
La nueva sucursal, la primera en el barrio, tiene una superficie de 200 metros cuadrados y cuenta con dos cajas, dos puestos de atención personalizada, una oficina trasera y un lobby con cajeros automáticos disponibles las 24 horas del día, entre otras cosas.
Además, el Jefe de Gabinete porteño indicó: "Esto forma parte del compromiso de crecimiento y de desarrollo que tenemos desde hace años con la zona sur".
En esa línea reconoció la importancia de la demolición del edificio Elefante Blanco, y manifestó: "En la nueva sede del Ministerio ahora trabajan muchísimos empleados que se sumaron y que ayudan en la integración de estos barrios".
"Es un paso más en la consolidación de nuevas oportunidades para el desarrollo de la zona sur". (Felipe Miguel)
De la actividad también participó el presidente del Banco Ciudad, Javier Ortíz Batalla, quien dijo: "Para nosotros esto es un mandato. Somos un banco social y siempre tratamos de estar junto a los vecinos".
En relación a eso, profundizó: "Llevamos más de 90 sucursales en todo el país, y ésta que inauguramos hoy es muy completa".
Para cerrar, Ortíz Batalla explicó que, entre otras cosas, "los vecinos tendrán la posibilidad de solicitar préstamos para emprendedores, préstamos personales y préstamos hipotecarios".
Asimismo, la sucursal también dispone de una tesorería con un puesto de trabajo y cajeros automáticos con dirección hacia el hall del Ministerio para que usen de manera exclusiva sus empleados. También tiene una gerencia, una sala de firmas, un recinto de seguridad y distintas áreas de servicio como un baño, una oficina, un cuarto de cables y un recinto de cajeros automáticos.
Allí, los vecinos de Villa Lugano podrán abrir cajas de ahorro, cuentas corrientes, pedir tarjetas de crédito y débito y solicitar seguros y plazos fijos. También tendrán la posibilidad de acceder a las distintas líneas de financiamiento con los requisitos, tasas y plazos más accesibles del mercado. Algunos de estos beneficios son préstamos personales y para emprendedores, y microcréditos de actividades formales e informales.
A fines del 2016, el Banco Ciudad comenzó a acompañar al Gobierno porteño en las distintas acciones educativas no formales que realizaba en Villa Lugano.
"Somos un banco social y siempre tratamos de estar junto a los vecinos". (Ortíz Batalla)
A partir de 2017 se bancarizaron distintas cooperativas y se llevaron a cabo más de 70 talleres de educación financiera y bancarización en comedores, merenderos y escuelas del barrio.
Asimismo, el “Cajero Escuela” del Banco Ciudad visitó distintas lugares del barrio para capacitar a los vecinos en el uso de medios electrónicos. De esta forma, más de 60 ya cuentan con una caja de ahorro.
En el último tiempo se implementó un programa para “Integradoras Barriales”, cuyo objetivo es capacitar a los vecinos en inclusión financiera a lo largo de seis encuentros. Además, junto a la Dirección General de Emprendedores del Gobierno se trabaja para impulsar los emprendimientos gastronómicos y abastecer la demanda creciente que surgió a partir de la instalación de las nuevas oficinas en la zona.
Esta nueva inauguración se enmarca en el proceso de expansión territorial del Banco Ciudad a nivel nacional. La entidad ya cuenta con 100 puestos de atención distribuidos en la Ciudad, el Gran Buenos Aires, Río Cuarto, Córdoba Capital, Mendoza y Tucumán. Próximamente se extenderá a Salta y Neuquén.
Desde la inauguración de la nueva sede del Ministerio de Desarrollo Humano y Hábitat porteño, 1.300 empleados trabajan en los tres pisos del edificio, que tiene una superficie de 21.000 metros cuadrados.
Además, enfrente tiene una plaza para que los más chicos puedan jugar y disfrutar del aire libre con sus familias y amigos.
Para poder construir el nuevo edificio hubo que demoler al ex Elefante Blanco, un símbolo de la decadencia y de la desidia de Villa Lugano que se transformó en nuevas oportunidades para los vecinos del barrio.
