El Jefe de Gabinete porteño, Felipe Miguel, recorrió este jueves las obras de la Línea C, que permanecerá cerrada hasta el domingo 2 de febrero inclusive, por tareas de modernización del sistema de señales y puesta en valor de la estación Retiro.
Dentro del plan para optimizar la línea, que ya cuenta con el 100% de su flota con aire acondicionado, se avanza con el reemplazo del sistema de señales actual, que es mecánico, por uno magnético. Así, se brindará un servicio más regular y se beneficiará a los casi 190 mil pasajeros que en promedio la utilizan a diario.
Beneficiará a los casi 190 mil pasajeros que la utilizan a diario.
Durante la recorrida, Felipe Miguel destacó la importancia de la obra “sobretodo en términos de señalización”, ya que “mejorará la regularidad, condición que impactará directamente en la calidad del servicio y beneficiará al promedio de 190.000 pasajeros que día a día usan esta línea", explicó.
Asimismo, manifestó que "el lunes estará restablecido el servicio para que todos los usuarios puedan volver a utilizarlo”.
Además, se incorporará el sistema Próximo Tren, que indica el tiempo restante para la llegada de la siguiente formación al andén, que ya funciona en las líneas A, B, D y E.
De la actividad también participó Eduardo de Montmollin, presidente de SBASE, quien destacó el "salto tecnológico que estamos dando con la instalación de este sistema digital, que va a mejorar el servicio de la Línea C. Y ahora estamos terminando las pruebas de seguridad, haciendo circular los trenes a lo largo de todo el recorrido".
Por último, en la estación de Retiro de la Línea C, se trabaja en la colocación de un ascensor para conectar la vía pública con el andén, el cambio de pisos y cielorrasos, pintura, iluminación LED, y mejora de los frentes de locales comerciales y boletería, que pronto estará disponible.
