De acuerdo con información de la Encuesta Trimestral de Ocupación e Ingresos (ETOI), de la Dirección General de Estadística y Censos – GCBA, en el primer trimestre de 2022, el empleo sigue en ascenso (50,4%) y se expande por encima de la actividad (55,3%), por lo que la tasa de desocupación se contrae (8,7% de la población activa, unas 148.500 personas buscan una ocupación y están disponibles para empezar a trabajar pero no la consiguen).
En paralelo, los ingresos laborales promedio crecen interanualmente (66,3%), así como la masa de percepto- res. Estas comparaciones se hacen contra un período de DISPO, en el marco de la pandemia COVID-191. Los ingresos no laborales también aumentan (69,7%) pero en este caso se reduce el número de perceptores a un nivel históricamente bajo. Se incrementan los valores por jubilaciones y pensiones (66,5% en promedio) y las otras transferencias monetarias del Estado como la AUH (52,7%).
El ingreso total familiar se expande (67,7%), muy por encima de los precios (51,7% - IPCBA), por dos factores: por un lado, el aumento de los ingresos individuales (laborales y no laborales) en paralelo al incremento en la actividad, que permite cierta recuperación del poder adquisitivo perdido durante la pandemia; y, por otro, la mayor cantidad de perceptores de ingresos.
De lo anterior resulta una mejora en las condiciones de vida medidas por el ingreso, que ocurre en relación a niveles altos de pobreza (y en particular, de indigencia) en el mismo trimestre de 2021.
