Martes 17 de Mayo de 2022

Reciclar nuestros hábitos

El 17 de mayo es el «Día Internacional del Reciclaje» y el programa Ministerio Sustentable lo celebró con un stand en el edificio del barrio 31 para conocer más sobre la importancia del correcto tratamiento y separación de los residuos.

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El programa Ministerio Sustentable busca promover la toma de conciencia sobre la importancia que tiene tratar los desechos de manera correcta. Por lo tanto, para conmemorar el «Día Internacional del Reciclaje» se colocó un stand el día martes 17 en el comedor del tercer piso para sensibilizar a los empleados y empleadas del Ministerio sobre las diferentes corrientes de residuos que existen y que se gestionan desde el edificio del barrio 31; residuos reciclables y orgánicos, residuos de aparatos eléctricos y electrónicos, y las botellas de amor. Los residuos reciclables son retirados por la cooperativa El Ceibo que lo trasladan al Centro Verde para que posteriormente se recicle.

Esta actividad, por otro lado, busca ser un llamado a la acción para reforzar la separación en origen de residuos, e incentivar el consumo responsable para reducir su generación.

Se cree que para el 2050 habrá más plástico que peces en el océano. Una forma de revertir esta situación es a través del reciclaje, que es el proceso de recolección y transformación de materiales para convertirlos en nuevos productos, y que de otro modo serían desechados como basura.

Cuando se recicla no solo se reduce la cantidad de residuos que llegan al relleno sanitario sino que también se reduce la energía y los gases de efecto invernadero que se generan, evitando el agotamiento de los recursos naturales. A modo de ejemplo, se precisa un 95% menos de energía para reciclar aluminio que para fabricarlo, el acero reciclado ahorra un 60% de energía; los periódicos reciclados, un 40%; los plásticos reciclados, un 70%; y el vidrio reciclado, un 40%.

Por otro lado, por cada tonelada de papel reciclado, 17 árboles se salvan de no ser talados (criterio que utiliza el GCBA para arbolar una plaza) y se ahorra un 50 % de agua. A su vez, una tonelada de plástico reciclado ahorra 130 kilos de petróleo, con 80 latas de gaseosa se hace una rueda de una bicicleta y con 40 botellas PET se hace un buzo polar.

Si toda la sociedad reciclara, pasaríamos de una economía lineal de extraer, fabricar y desperdiciar, a una economía circular, que no permitiría que se desperdicien los residuos en los vertederos y supondría enormes beneficios ambientales, económicos y sociales.

Donde algunos ven residuos, otros ven oportunidades

El reciclaje no solo tiene un impacto ambiental positivo, sino que también tiene un impacto social con los recuperadores urbanos quienes se encargan de la recolección, acopio y posterior venta. Los recuperadores urbanos cumplen un papel muy importante en la conservación del ambiente y son el eslabón fundamental del sistema de reciclaje. Actualmente en CABA hay 12 cooperativas a cargo que se dividen por zona y 6.500 trabajadores.

Todo el material reciclable que se recolecta por los diferentes medios de captación es destinado a los 16 Centros Verdes. Allí se los clasifica por tipo y condición, se los pesa, enfarda y prepara para su venta y reinserción dentro del circuito productivo como materia prima.