Hablá con tus hijos

Consejos útiles para tratar el consumo de alcohol con niños y adolescentes.

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Avanzá paso a paso

Encontrar el equilibrio entre proteger a tu hijo/a y darle libertad no es fácil. No se puede estar a su lado en todo momento, y aunque pudiésemos, no le haría mucho bien. Sin embargo, la comunicación y la confianza pueden ayudarle a que tome las decisiones adecuadas en situaciones difíciles, aprenda de sus errores, sea siempre prudente y que te pida consejos.

Nadie es perfecto

Es importante ayudarles a ganar confianza y seguridad en sí mismos, para ello hay que valorarles y reconocerles sus logros, capacidades y limitaciones. Hay que enseñarles que ni a vos ni a ellos les saldrán siempre bien las cosas. Es fundamental aceptar que cometer errores es inevitable, lo importante es superarlos y aprender de ellos.

Conocé a tu hijo

Tenés que conocer a tu hijo/a, con sus particularidades, sus inquietudes, lo que le gusta y le disgusta tanto de sí mismo como del mundo que le rodea. Hablar con tu hijo/a, preguntarle y escucharlo/a te ayudará a conocerlo/a más.

Establecé un vínculo

Cuando un adolescente siente que forma parte de un grupo estable, tiene una mayor tendencia a respetar las normas acordadas. Es importante crear un ambiente donde tu hijo/a perciba la existencia de esos vínculos. Establecer determinadas rutinas para pasar tiempo juntos les dará más oportunidades de hablar entre ustedes, lo que contribuirá a que tu hijo/a sienta que puede contar con vos si tiene un problema.

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Hacé que se sienta respetado

Es importante trasmitirles que respetás sus opiniones, que tu hijo/a sienta que puede expresarlas y van a ser tomadas en consideración. También es importante trasmitirles lo orgullosos que estamos de ellos. Si sus amigos se meten en problemas pero tu hijo/a se mantiene al margen, demostrale que estás orgulloso de que se haya comportado de una manera tan madura.

Poné límites

Es fundamental que tu hijo/a conozca las reglas básicas y las consecuencias de no respetarlas. Inevitablemente las pondrá a prueba, así que no hagas amenazas que no vayas a cumplir. Un castigo eficaz consiste en suprimir ciertos privilegios, como una salida, la visita de un amigo o mirar la tele. También es importante elogiar a tu hijo/a cuando se comporte bien. Si explicás las razones de las reglas que estableciste, ayudarás a que tu hijo/a las entienda y las respete. Conocer con quién está tu hijo/a y cuándo volverá a casa es importante para su seguridad.

Confiá en él

Si le trasmitís y demostrás a tu hijo/a que confías en él/ella, va a generar un ambiente en el cual se sienta que puede decir la verdad. Es importante no juzgar ni enojarse. Si estás dispuesto a escuchar su versión y comentar posibles alternativas, ayudarás a que tome decisiones razonables en el futuro. La confianza es esencial en una comunicación abierta, si tu hijo/a siente que puede hablar con vos abiertamente te va a pedir consejos en situaciones difíciles.

Asegurate de que esté informado

A menudo los adolescentes están más informados de lo que creemos, aunque la información no se basa en hechos. Tanto en relación con el consumo de alcohol como en otros temas, asegurate de que tu hijo disponga de la información adecuada y sepa que cuenta con vos si quiere informarse mejor. Escuchalo/a, intentá no sermonear ni asustar, comentá los pros y los contras de manera objetiva. Utilizá un lenguaje que pueda comprender y ejemplos cercanos a ellos.

Predicá con el ejemplo

Como responsable de un adolescente, no subestimes la influencia de tus propios actos, actitudes y comentarios ya que tienen un gran impacto en su comportamiento. Pensá qué mensaje le estás transmitiendo con tu ejemplo. Será difícil convencerlo/a de que se comporte de manera responsable si no sos un buen modelo a seguir.

¿Cómo abordar el tema?

¿Por qué debo hablar del tema del alcohol con mi hijo?

La comunicación es una parte vital en el aprendizaje y el desarrollo personal de tu hijo. Lo que decís y lo que hacés tiene una gran influencia sobre tu hijo/a, por eso estás en una posición excelente para asegurarte de que cuente con la información necesaria para tomar decisiones apropiadas en el futuro. Aunque el tema del consumo de alcohol en ocasiones se trate en el colegio, es muy importante que lo trates desde el seno de la familia.

¿Cómo lo hago?

La mejor forma es que el tema surja de manera natural, aprovechá alguna noticia o que tu hijo/a te haga preguntas. Tratá el tema de forma que los haga sentir cómodos y se genere un espacio de confianza y diálogo. Tenés que estar dispuesto a escuchar opiniones que no te gusten y respetarlas. Lo ideal sería que hables del tema antes de que tu hijo se inicie en el consumo o se enfrente a la presión de grupo para consumir.

¿Qué le digo?

Los adolescentes son conscientes de qué tipo de comportamientos son aceptables o no entre los adultos, de modo que es posible comenzar a educarlos a edades muy tempranas. Cuando hables con tu hijo/a sobre el consumo de alcohol, lo importante es dar información objetiva, como los efectos que tiene en el cuerpo, las consecuencias de su abuso a corto y largo plazo, cómo afecta a sus capacidades, etc. A través de la información objetiva, se derriban sus ideas erróneas sobre el alcohol y su consumo, y se brindan herramientas para tomar decisiones adecuadas para evitar los peligros asociados al consumo de alcohol.

¿A qué edad debo permitir que tome mi hijo beba?

Ningún menor de 18 años puede comprar alcohol ni consumirlo. Ninguna cantidad de alcohol es segura para los menores, ya que el alcohol afecta en mayor medida a su organismo que está pleno proceso de desarrollo, por eso su consumo es ilegal. Asegurate de que tu hijo comprenda por qué beber alcohol puede ser peligroso para los menores.

¿Qué puedo hacer cuando no estoy presente?

A partir de los 11 años los niños empiezan a pasar cada vez más tiempo fuera de casa. Es natural que te preocupes de las compañías de tus hijos. Interesate por conocer a sus amigos, recibilos en casa, promové en tu hijo/a un tipo de ocio positivo y aceptá que tu hijo necesita contar con cierto grado de libertad. Si un día te encontrás con la situación de que tu hijo/a llega a casa con síntomas de estuvo bebiendo, es fácil reaccionar de forma exagerada, pero controlá tus emociones y posponé la charla para otro momento en el que se encuentre en un estado de lucidez. Demostrale tu rechazo ante esa actitud y asegurate de que conozca las reglas, lo que es aceptable y lo que no, y cuáles son las consecuencias de no cumplirlas.

En mi familia hubo casos de consumo abusivo, ¿debo prohibir que mi hijo beba?

Hablá de manera abierta sobre los problemas que el consumo abusivo ocasionó en tu familia y explicá la diferencia entre un consumo moderado y un consumo abusivo en los adultos. Explicale también por qué la ley prohíbe beber a los menores de edad y cómo el alcohol afecta a su desarrollo. Dejá en claro que, para los menores, lo más recomendable es no beber nada en absoluto. Siempre recordá que sos un modelo de comportamiento para tu hijo/a, por eso estás en una posición idónea para demostrar que es posible beber de forma responsable y con moderación cuando se tiene la edad suficiente. Por eso es importante ser coherente entre lo que le dicen a sus hijos y su propia relación con el alcohol.

Mi hijo/a adolescente bebe alcohol de vez en cuando, ¿qué consejos puedo darle?

Es importante hacerle entender que si todavía no alcanzó la edad legal para comprar alcohol, está infringiendo la ley si compra alcohol o si pide a un adulto que se lo compre. Tenés que explicarle por qué beber alcohol a su edad es peligroso, e intentar disuadirle de que lo haga hasta que sea mayor. Si ya es mayor de edad, se pueden dar los siguientes consejos para que reduzca los riesgos:

  • Recordale que puede decidir no beber y que muchos jóvenes también lo han decidido.
  • En el caso de que vaya hacerlo, que beba despacio y que nunca se tome una copa "de un trago".
  • Que alterne las bebidas alcohólicas con refrescos o agua, o que simplemente opte por no beber.
  • Que salga con amigos responsables y en quienes tenga confianza, y que no ceda a la presión de sus amigos para beber.
  • Que te diga dónde va a estar y cómo va a volver a casa (transporte público, con un conductor alternativo, otro padre que vaya a buscarlos, etc.)
  • Si tomó alcohol que no maneje ni se suba al auto de un conductor que bebió.
  • Que te llame si pasa algo.

¿Puedo ayudar a mi hijo/a adolescente a que se resista ante la presión de no beber?

Podés ayudar a tu hijo/a hablando con él/ella sobre lo que te preocupa y escuchando lo que te diga. De esta forma se pueden encontrar soluciones realistas entre los dos. La presión ejercida por compañeros y amigos tiene una enorme influencia en esta etapa, cuando los adolescentes son más susceptibles. Los grupos cuentan con líderes y seguidores, y todos ellos deben respetar las "reglas". Hay que enseñarles a defender su punto de vista y a comportarse de acuerdo con su criterio y no adaptando su conducta a lo que marque el líder del grupo. Es importante valorar las consecuencias de sus actos y decisiones. Si tu hijo/a tiene todos los datos sobre el consumo de alcohol que necesita y cuenta con la capacidad necesaria para tomar sus propias decisiones, va a adoptar posiciones inteligentes cuando no estés presente.

¿Cómo puedo saber si mi hijo/a adolescente tiene un problema con el alcohol?

A esta edad, es bastante normal que se produzcan cambios en el comportamiento que no tienen por qué estar necesariamente relacionados con el consumo de alcohol. La adolescencia, las amistades y otras presiones afectan a tu hijo/a, quien de vez en cuando, se mostrará temperamental o deprimido.

Si realmente existe un problema, intentá encontrar y tratar la causa, no sólo los síntomas. ¿Se trata de una forma de escape, de ceder a la presión de sus amigos o de la falta de orientación? Las posibilidades son infinitas, y no tienen por qué estar necesariamente relacionadas con el alcohol.