5 curiosidades sobre nuestros perros
1- Huellas dactilares
Seguramente muchos no sepan que las narices de nuestros perros pueden ser como un carnet de identificación para cada uno de nuestros adorables amigos, ya que el patrón del tejido cutáneo de la nariz se asemeja a los patrones de las huellas dactilares: son similares entre sí, pero únicos en cada uno. Existen algunos países que utilizan este método para la identificación, ya que es menos invasivo al momento de un registro que, por ejemplo, un chip.
2 - Reconocer emociones
Los perros tienen la capacidad de integrar distintas fuentes sensoriales, lo que les permite tener una percepción coherente de las emociones humanas. Esta es una capacidad cognitiva, de ahí la razón de que esta asociación y “rejunte” de información pueda hacer que ellos reconozcan nuestras emociones, debido a la habilidad de leer expresiones faciales, entender la inflexión de la voz humana, entre otras señales. Puede que las emociones humanas afecten a las emociones de nuestros perros, porque, de alguna forma, están unidas debido a la domesticación, la convivencia y el lazo profundo que forma el binomio persona-perro. Por ejemplo, puede suceder que, cuando estés triste, tu perro lo perciba y e incluso se entristezca por igual, o, por el contrario, reaccione a esa emoción intentando animarte con juegos, lamidas y moviéndote la cola para que cambie tu humor.
3 - Tomar agua
Beber agua es una actividad esencial y, si bien es algo que realizamos a diario, pocas veces nos detenemos a pensar en lo difícil que esto resulta para animales como los perros o los gatos, que no tienen la capacidad de juntar los labios y succionar líquido hacia la garganta, sino que deben utilizar su lengua y la fuerza del interior de la boca para mover el fluido en contra de la gravedad, además de atrapar el agua a una gran velocidad, creando con la boca una especie de cuchara.
4 - Transpiración
Las glándulas sudoríparas no están esparcidas por todo el cuerpo de nuestras mascotas, sino que sudan a través de las almohadillas de las patas, la piel del hocico, y la boca, mediante el jadeo. La boca es la zona principal por donde sudan los perros: jadean para refrigerarse, y la forma más rápida y eficiente para su enfriamiento es esta. De ahí que en verano, o luego de una exigencia física sostenida, podemos notar los gotones que caen de sus bocas.
La piel del área del hocico y las almohadillas de las patas tiene glándulas sudoríparas. Esto nos explica el porqué de que un perro expuesto a altas temperaturas vaya dejando sus huellitas al caminar sobre las baldosas.
Por último, la cara y las orejas del perro también colaboran en la refrigeración del organismo en lo que respecta al enfriamiento del cerebro
5 - Visión nocturna
Su visión nocturna es bastante impresionante, y esto se debe a que tienen un extra: no solo en el tamaño de las pupilas, que les permite un mayor ingreso de luz, sino que disponen también de una estructura llamada tapetum lucidum, que es una especie de espejo que refleja la luz de forma tal que esta vuelva a pasar por la retina, dándole una segunda oportunidad de detectar la luz cuando la misma es escasa.
Los perros también cuentan con una visión periférica más amplia que la de los humanos: mientras que la nuestra es de unos 180 grados, la suya llega a los 250. Sus bigotes también los ayudan a orientarse, ya que hay nervios, vasos y músculos que les permiten moverlos y detectar cambios de temperatura, corrientes de aire, y hasta evaluar el tamaño de una rendija para evaluar sus posibilidades de desplazamiento.
Olimpo_canino
Nancy N. Domínguez
Adiestradora de canes (Escuela adiestramiento canino extensión FAC. Cs. Veterinarias -UBA-)
