El Gobierno porteño anunció la profesionalización de la Dirección de Medicina Laboral, con el fin de llevar adelante políticas que controlen el ausentismo de los empleados públicos y que contribuyan a la prevención de sus problemas de salud.

El jefe de Gobierno, Mauricio Macri, quien estuvo acompañado por la vicejefa, Gabriela Michetti; y el ministro de Hacienda, Néstor Grindetti; advirtió que "por irresponsabilidad y por falta de gestión a los empleados de la Ciudad se les ha estado faltando el respeto durante muchos años, porque se ha descuidado la capacidad del Estado para prevenir y controlar la salud de su personal".

Durante una conferencia de prensa señaló, a modo de ejemplo de lo que "son prácticas oscuras e inentendibles", que durante 2007 se otorgaron 2.700.000 días de licencia en el ámbito de la administración pública de la Ciudad”.

El Jefe de Gobierno agregó que esa cifra, dividida por la cantidad de agentes, equivale "20 días por cada empleado".

Agregó que frente a ese cuadro "es lógico que esos buenos empleados que no faltan nunca y que todos los días vienen a cumplir su función al servicio de los vecinos hoy se estén preguntando cómo puede ser que haya tanta gente que viva de licencia prolongada y sin trabajar".

Macri reveló que "la misma Dirección de Medicina Laboral que actuó con tanta desidia en muchos casos incurrió, además, en graves arbitrariedades, como negarle la extensión de una licencia a una docente que había sufrido la muerte de un hijo".

"Mientras había libertinaje para unos se cometió semejante barbaridad con una persona que sufrió lo peor que le puede pasar a un ser humano, como es la muerte de un hijo", afirmó.

El jefe de Gobierno subrayó que "aquí también vamos a aplicar el sentido común marcando una raya entre los que trabajan y los que no trabajan, porque queremos restituir la cultura del esfuerzo".

Consideró, asimismo, que el vacío existente hasta ahora en materia de controles, que incentiva el ausentismo injustificado en los lugares de trabajo, es "una falta de respeto a los vecinos que pagan sus impuestos y esperan que los empleados les den servicios y no que estén de licencia injustificada y sin trabajar".

Por su parte, el ministro Grindetti, apuntó que "el desorden que se ha encontrado en esta área es muy grande y esto redunda en serios problemas operativos que complican la gestión, porque cada persona que tiene un día de ausentismo, sobre todo en el área de educación, necesita un suplente y eso es más costo para los vecinos".

Grindetti puntualizó que a partir de la asunción del nuevo titular de la Dirección, Daniel Ferranti, se ha puesto en marcha una política para profesionalizar el sector y señaló que de esta manera se "pondrá freno a todo lo que signifique abusos, excesos y mala intención en el otorgamiento de licencias", mientras que, simultáneamente, "se trabajará poniendo el acento en el diagnóstico y en la prevención de las enfermedades profesionales".

Con ese objetivo dijo que se concursarán los cargos médicos a partir del 1 de marzo y se fortalecerán los controles médicos a domicilio, que hoy no se están practicando.

A su turno, la vicejefa de Gobierno, Gabriela Michetti, afirmó que "así como nos ocupamos de poner en orden la obra social de la Ciudad (ObSBA) para que brinde buenos servicios ahora vamos a terminar con esta desidia, porque no podemos mirar para otro lado cuando está en juego el derecho a la salud de la gente que trabaja".