AÑO 2000


"Decir arte es ponerse en calma, tomarse un tiempo y mirar descubriendo a través de la agudeza de los sentidos la belleza..."

En esta revista trabajamos en el proyecto "Los Creadores van a la Escuela.
Los chicos de primer grado realizaron diferentes actividades vinculadas con la obra de Benito Quinquela Martín, una de ellas fue entrevistar a Normanda Binasco Pertino, pupila del pintor.

..."Llegó un día a la escuela y en la solapa de su tapado lucía la "Orden del Tornillo".
"Es la condecoración más hermosa que recibí. El decía que el tornillo que te faltaba en la cabeza, lo ponía en el corazón.
En el caso de las mujeres era más pequeño que el que le daba a los hombres. Este fue el número 300, el último que Benito entregó. Cuando lo hacía realizaba una ceremonia, se vestía con un traje que parecía de almirante y hasta usaba un bastón. Fue un honor haberla recibido".

Murió fisicamente, pero su espíritu sigue viviendo a través de su obra".