Consecuencias de la pérdida y el desperdicio de alimentos

La pérdida y el desperdicio de alimentos tienen una multiplicidad de efectos sociales, económicos y ambientales.

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Sociales

Según la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y Agricultura (FAO), los alimentos producidos que nunca llegan a consumirse serían suficientes para alimentar a 2.000 millones de personas en todo el mundo.

Es muy importante tener en cuenta que las principales causas del desperdicio de alimentos están relacionadas a nuestro comportamiento como consumidores. Por ejemplo, muchos alimentos se desperdician porque no cumplen con los requisitos de forma, tamaño o apariencia que solemos asociar con la “calidad” de un producto.

Por otra parte también, es frecuente que como consumidores no estemos coordinados con el resto de los participantes de la cadena agroalimentaria. En general sabemos poco sobre quiénes producen nuestros alimentos. Para conocer más sobre ellos podemos elegir hacer nuestras compras en ferias, donde generalmente son los propios productores los que comercializan sus productos.

Por último, planificar nuestras compras nos ayuda a reducir el desperdicio de alimentos en casa.

Económicas

La pérdida y desperdicio de alimentos también puede medirse en términos económicos a lo largo de toda la cadena agroalimentaria. En las primeras etapas de la cadena reducir las pérdidas disminuye los costos de producción, porque el sistema productivo se torna más eficiente.

Reducir los desperdicios en nuestros hogares nos ayuda a ahorrar dinero: en la Ciudad de Buenos Aires se estima que los hogares gastan en promedio 23 millones de dólares al mes en alimentos que terminan siendo desperdiciados.

Ambientales

Desperdiciar alimentos es desperdiciar también recursos naturales. Son numerosos los insumos que utilizamos para producir alimentos, entre ellos: nutrientes del suelo, agua, energía fósil que se utiliza no solo para las maquinarias sino también para producir insumos como fertilizantes. Entonces, si reducimos las pérdidas y el desperdicio de alimentos también reducimos el impacto ambiental y ayudamos a mitigar los efectos del cambio climático.


Tu compromiso puede contribuir directamente en la reducción del desperdicio de alimentos. Te compartimos consejos que te ayudarán a lograrlo.