El pasado 19 de mayo una comitiva del Hospital Muñiz, presidida por su capellán, el Padre Gustavo, junto a la Ministra de Salud Dra. Graciela Reybaud y el Director del Hospital Dr. Rubén Masini, entregaron a Su Santidad el Papa Francisco las intenciones del personal de los hospitales y centros de salud de la Ciudad de Buenos Aires, el SAME y el Ministerio de Salud.
El Papa Francisco reflexionó sobre la Campaña “Cuidar al que Cuida”: “Es lindo que se cuiden entre ustedes y que hablen de las experiencias que están viviendo cada día. Ustedes no van a salvar a nadie, ninguno de nosotros salva a nadie. Tenemos que cuidar, dar ternura, acompañar, pero no vamos a hacer beneficencia. No es una sociedad de beneficencia lo que ustedes forman: es una vocación, desde la sonrisa, la caricia, ayudando a dar de comer a una persona o cambiándole las sábanas, conversar o comentar un partido de fútbol, lo que sea. Eso es servicio, compañía y salvación para ustedes. No hacen beneficencia ni tampoco hacen banquetes de beneficencia. El mejor banquete es la buena voluntad y el cariño que dan ustedes. Tienen que cuidarse para no ponerse impacientes, no olvidarse de las obligaciones de la casa. Los mejores cuidadores de ustedes son ustedes mismos. En este momento pienso en las salas de los hospitales, los veo a ustedes y simplemente les digo: ‘Gracias’. Gracias por cuidar a Jesús, a los enfermos y de cuidar a Jesús en ustedes”.
Finalmente, el Papa Francisco mandó su bendición a todos los trabajadores de los hospitales de la Ciudad: “Que su rostro muestre su gracia, que descubra su rostro y les conceda la paz. Que la bendición de Dios Todopoderoso, del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo esté con ustedes y permanezca para siempre. AMEN. Y a través de ustedes les mando un saludo a cada uno de todos los médicos, enfermeros, trabajadores, camilleros, a todos los que trabajan en el hospital. El centro del hospital es Jesús en el enfermo.”
