Este mes se suele asociar a todo tipo de celebraciones, reuniones y compromisos sociales que tienen como eje central la comida. Cuando hablamos de tener una alimentación saludable en diciembre muchos consideran que esto es simplemente imposible de llevar a la práctica. Sin embargo, el punto inicial es comprender a que llamamos “alimentación saludable”.
“Una alimentación saludable es aquella que aporta la energía y los nutrientes necesarios para cada etapa de la vida. Debe ser suficiente, completa, armónica y adecuada.”
Muchas veces se piensa que “saludable” es sinónimo de restricción y alimentos “aburridos”. Pero según esta definición podemos entender que saludable es cuando los alimentos son suficientes para cubrir con el requerimiento de calorías y nutrientes, cuando se incorporan alimentos de todo los grupos, es decir, variedad. También cuando los alimentos guardan una relación adecuada de proporciones entre sí, y está adaptada a los gustos, hábitos, cultura y economía de cada persona estamos hablando de alimentación saludable.
Por tanto, lejos de prohibiciones, una alimentación saludable implica tener presente algunos tips prácticos para no caer en excesos ni restringir nuestra alimentación a un solo grupo de alimentos, como pueden ser por ejemplo, los hidratos de carbono o grasas.
La clave está en pequeños detalles, que harán la gran diferencia:
No saltees ninguna de las comidas diarias para no llegar a la cena con hambre.
Comé despacio, da bocados pequeños y masticá bien los alimentos. Esto ayuda a comer más conscientemente y evitar el exceso.
Consumí porciones pequeñas. Es habitual que las personas coman hasta terminar el plato, por lo que servirse poca cantidad es una buena medida para no excederse.
Moderá el consumo de alcohol y bebidas azucaradas. El consumo de bebidas alcohólicas en exceso, además de predisponer a conductas de riesgo, representa un aporte considerable de calorías.
Prepará ensaladas variadas, que incluyan vegetales frescos de todo tipo y color.
Prepará postres a base de fruta fresca, como ensaladas, pinchos o helados caseros.
No dejes de realizar actividad física durante estos días.
Recordá que, al fin y al cabo y más allá de la comida, lo más importante de las fiestas es encontrarse y compartir con los seres queridos.
