La presencia de contaminantes en el Riachuelo podría disminuir gracias a la ayuda de ciertas plantas nativas que tienen la capacidad de remover compuestos como metales pesados que hoy se encuentran en el agua. El proyecto elaborado por la Agencia de Protección Ambiental (APrA), dependiente del Ministerio de Ambiente y Espacio Público, será presentado mañana en puente Alsina, durante la celebración del Día Internacional de la Biodiversidad.
El plan de fitorremediación fue desarrollado en conjunto con la Universidad de Flores y consiste en la confección de biorrollos, que son estructuras cilíndricas de un metro de largo por veinte centímetros de diámetro, armados en telas degradables y rellenos con materiales vegetales de poda. En estos rollos se plantan y alojan las especies seleccionadas que, una vez que enraízan, son fijados en la costa. De este modo, se garantiza que las plantas colocadas en los bordes de la ribera prosperen y se fijen de manera segura.
En la primera etapa, se instalarán 50 biorrollos en la zona del río en donde falta vegetación. Las especies que se plantarán son el junco, el cucharero, la redondita de agua y la flor de Santa Lucía, entre otras. Estas plantas tienen una gran capacidad de absorción y tolerancia a los metales pesados, de manera que pueden vivir en un ambiente tan hostil como el del Riachuelo, ya que sus procesos fisiológicos como la fotosíntesis y la respiración no se ven afectados por los contaminantes.
Las especies seleccionadas han presentado, en estudios de laboratorio, la particularidad de absorber metales como cromo, zinc y cobre. Esos contaminantes no vuelven al agua ni al suelo y tampoco llegan a las hojas, por lo que no hay riesgo de que estos metales vuelvan al ambiente en caso de que se poden las plantas.
Durante el primer relevamiento, los integrantes del equipo de trabajo de la Universidad de Flores realizaron un primer inventario de la flora presente en el lugar y midieron la capacidad de absorción de las distintas especies. En el caso de la Sagittaria montevidensis (saeta) se demostró que en las raíces había presencia de cromo, zinc y cobre en valores equivalentes a un tercio de los que se encontraron en el suelo de la zona de muestreo.
La Cuenca del río Matanza - Riachuelo (CMR) es un área crítica respecto del estado de contaminación del curso de agua y sus riberas. “Los efluentes industriales y cloacales son las principales fuentes de contaminación hídrica. En los suelos de la ribera y en los sedimentos del fondo del cauce del río, los contenidos de algunos metales pesados, junto con la alta carga orgánica, representan los principales contaminantes -explicó Juan Carlos Villalonga, presidente de la APrA-. Este proyecto permitirá verificar hasta qué punto estas especies pueden contribuir para disminuir los contaminantes presentes en el Riachuelo.
El Día Internacional de la Diversidad Biológica fue establecido por la Organización de las Naciones Unidas con el propósito de sensibilizar y educar a la ciudadanía en aspectos relacionados con la conservación y cuidado de la biodiversidad mundial. Se celebra el 22 de mayo.
