El jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Mauricio Macri, ratificó hoy su absoluta desvinculación del caso de las escuchas telefónicas, aseguró que la causa tiene una connotación política digitada por el kircherismo “que pone en riesgo la democracia del país” y confirmó que esta situación no generará alejamientos de funcionarios “porque hay que seguir trabajando para la gente”.

Macri señaló que el Juez federal Norberto Oyarbide “no ha sido ecuánime en su actuación” al frente de la causa desde el momento en que “demuestra que ha atomizado la investigación y la ha direccionado solamente en búsqueda del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires y el jefe de Gobierno” porteño.

“Me pasé más de seis horas delante del juez pidiéndole que me señale un solo indicio que ponga de manifiesto que yo pertenezca a alguna asociación y él no pudo decirme un solo hecho en el cual yo esté involucrado”, recalcó Macri en una conferencia de prensa realizada en el Palacio de Gobierno junto a los miembros de su gabinete y legisladores nacionales y provinciales.

Al concurrir hoy ante el juez Oyarbide, el jefe de Gobierno presentó un escrito en que se solicita al magistrado que ordene nuevas medidas de prueba, entre ellas que las autoridades de la Policía Federal respondan sobre las actividades que cumplía Ciro James dentro de esa fuerza.

Dijo que la investigación “ha sido muy decepcionante porque fueron meses que colaboramos en la investigación, con dedicación y esfuerzo a pesar de las desprolijidades de la causa”.

El jefe de Gobierno adelantó que los pormenores del caso y las pruebas aportadas pueden leerse en el sitio de Internet www.mauriciomacri.com.ar “para que todos sepan como es esta causa”.

Respecto de James señaló que “fue un empleado entre los 120 mil” que tiene la administración de Ciudad de Buenos Aires y que “en unos pocos meses que trabajó montó una asociación ilícita para escuchar a ciudadanos que tienen problemas familiares, conyugales y comerciales, entre ellos (Sergio) Burstein y (Daniel) Leonardo”.

Macri dijo que hubo especulaciones en torno a la causa que quedaron desvirtuadas y en ese sentido señaló que la contratación de James como abogado en el Ministerio de Educación figura en el boletín oficial y que nunca ingresó en la Policía Metropolitana.

“El señor James trabajó seis años en la Federal, primero como policía, después como policía secreto, luego varios años en la Universidad de La Matanza. ¿Cuál es el lugar donde investigó el juzgado del doctor Oyarbide?. Es donde trabajó meses. Ahí focalizó toda la investigación”, enfatizó.

Recalcó que “todo esto marca claramente el nivel de direccionamiento de esta causa y esconde un modus operandi que pone en riesgo la democracia de este país”.

“Y detrás de esto está el señor (Néstor) Kirchner porque está en contra de cualquiera que busque dialogar y trabajar con consenso”, denunció.

Recordó que este tipo de maniobras no son nuevas porque “ya pasó con la denuncia trucha contra (Enrique) Olivera en el 2005, luego contra Francisco De Narváez en el 2007, y ahora la empezó con (el diputado nacional Claudio) Lozano, así como la descalificación contra la Iglesia, el campo en su momento, los medios y el vicepresidente Julio Cobos”.

“No se le escapa a nadie que nuestra gestión, desde el primer día, ha sufrido todo tipo de entorpecimientos de parte del Gobierno Nacional, pero nosotros no hemos parado y vamos a seguir adelante pensando que queda un año por delante y queda en poder de la sociedad decir basta”.

Aseguró que “Oyarbide ha sido funcional al Gobierno nacional en esta causa”, al igual que “cuando en tiempo récord liberó de la causa por enriquecimiento ilícito al matrimonio Kirchner, lo mismo en la causa Skanska que pega en el corazón del kirchnerismo”.

“El objetivo es dañar a un espacio político que genera expectativas a futuro”, agregó y reiteró su convicción de que “el kirchnerismo tiene fecha de vencimiento, en 2011.

Macri afirmó que los argentinos “queremos un sistema judicial independiente del poder de turno y muchos jueces no merecen que su trabajo se tiña de esta modalidad”.

También indicó que resulta sugestivo que apenas Burstein se enteró de que su nombre figuraba entre los presuntos escuchados un móvil de la Policía Federal pasó a buscarlo por su domicilio en menos de media hora para que hiciese la denuncia en una seccional.

“La verdad es que todos queremos que cuando nos asaltan en menos de media hora concurra un patrullero y nos lleve a la comisaría para hacer la denuncia”, apuntó.