Verónica divide sus tiempos para poder estudiar y dedicarle tiempo a su hija, y piensa seguir estudiando una vez que termine la secundaria.
¿Cómo fue el primer día de clases? El primer día sentí algo muy lindo, me sentía como una niña, feliz, porque iba a estudiar y poder aprender. Pasé por muchas cosas cuando era chica, tenía que trabajar mucho y, por eso, no tuve la oportunidad de terminarla. Mi sueño es enseñarle a la gente que lo necesita para que puedan salir adelante, entonces tengo que estar bien preparada, capacitada para poder hacerlo.
¿Te sentís acompañada para lograrlo? Tengo una hija de 11 meses y en la escuela me acompañan para que pueda dedicarle tiempo a ella también. Me apoyaron y me motivaron para que pueda seguir esforzándome por terminar la escuela, y mi marido me acompaña mucho también.
¿Te gustaría seguir estudiando? Estoy pensando en terminar la escuela este año, y sí, tengo pensado seguir estudiando. Siempre pensé en ser profesora de educación física, aunque también me gustaría poder estudiar derecho.
“Antes yo no sabía leer, y ahora me puedo expresar mejor y enseñar. Aprendí que con sacrificio uno puede lograr todo y vale la pena”.
A Katherin le daba miedo retomar el colegio pero su marido la impulsó para que se inscriba. Ahora sueña con recibirse de abogada y ser un ejemplo para su hija.
¿Recordás qué sentías cuando empezaste a estudiar? Al principio me costaron las materias, pero el profesor tuvo mucha paciencia. Estaba un poco nerviosa, mi marido se anotó primero y me animó a que me inscribiera yo también. En el medio encontré personas que me apoyaron y eso fue muy importante. Los profesores nos animan a que vayamos a pesar de todo, y lo hacemos porque queremos cumplir un sueño.
¿Y qué sentís hoy? Si hace tres años me preguntabas si podía terminar la escuela te respondía que no. Hoy me siento orgullosa y te digo que sí. Me siento en un ambiente muy familiar, muy cómodo y eso es importante para sentirnos contenidos. Sin ese apoyo es muy difícil. Porque la gente dice: “¿Vas a hacer el colegio ahora que sos grande?”, como si la edad fuera una imposibilidad para que uno termine los estudios.
¿Cuál es tu objetivo? Mi primer objetivo, que antes veía muy lejano, es terminar el colegio. Después me gustaría inscribirme el año que viene para ser abogada. Lo quiero hacer para defender a las mujeres que hoy en día son tan lastimadas. Cuando me reciba va a ser un día tan importante, voy a cerrar una etapa y empezar una nueva. Una nueva etapa que nunca me había visto venir.
“Que nada te frene para poder avanzar. Estudiar es un futuro, estudiar es mejorar y nunca está de más: te abre oportunidades”.
Verónica y Katherin eligieron terminar la secundaria con el plan FINES. Vos podés estudiar a tu manera, acercate al Galpón de lunes a viernes de 9 a 15hs, ¡y elegí tu futuro!
