Los equipos de rescate y emergencias continuaban desplegando una intensa y laboriosa tarea para remover los escombros producto del derrumbe del gimnasio, ubicado en la calle Mendoza y Triunvirato, barrio de Villa Urquiza, en el marco de un operativo que movilizó a cerca de 200 agentes del Gobierno de la Ciudad. 

Esa tarea era ejecutada con extremo cuidado, en forma manual, debido a la existencia de personas desaparecidas y con la presencia permanente de un cuerpo de psicólogos para asistir a los familiares de las víctimas. 

El jefe de Gobierno, Mauricio Macri, volvió a presentarse en el lugar para supervisar la marcha de los trabajos luego de la conferencia de prensa que brindó para informar detalles sobre el hecho. 

Una grúa de gran porte fue trasladada hasta las adyacencias del predio para retirar los grandes bloques de concreto que hacían dificultosas las tareas de búsqueda de eventuales personas atrapadas. 

El operativo sumó desde el lunes a personal de las direcciones de Logística y Defensa Civil, de Guardia de Auxilio, el SAME, las policías Metropolitana y Federal, el cuerpo de Bomberos, el Dispositivo de Eventos Especiales y la Unidad de Catástrofes, entre otras áreas. 

Intervino, además, el equipo de factores humanos de la Ciudad, compuesto por dos psicólogos y dos psiquiatras, asiste a los familiares de dos personas que se encontrarían atrapadas en las ruinas del gimnasio. 

Ambulancias, unidades móviles, torres de iluminación, grupos electrógenos, una grúa con barquilla y herramientas especiales componen el equipo de logística. 

En tanto que los once heridos rescatados de entre los escombros fueron atendidos en los Hospitales de la Ciudad Pirovano, Tornú, Zubizarreta y Fernández y dados de alta o trasladados a clínicas privadas.