Las aperturas que las empresas de servicio hacen en la vía pública, que no se cierran en tiempo y forma, son uno de los motivos que hacen que la ciudad tenga baches o veredas rotas. Es por eso que el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires comenzó el año pasado un Plan de Control y Fiscalización gracias al cual se redujeron a un 12% las situaciones irregulares.
De las 20.338 inspecciones que se realizaron durante el primer cuatrimestre del 2014 se pudo verificar que el 71% de las aperturas fueron cerradas a tiempo, el 17% se realizó fuera de término y el 12%, 2537 aperturas, quedaron sin cerrar. En total un 88% de las aperturas fueron cerradas, en comparación con el 45% de cumplimiento antes de que se implementara este plan.
Por debajo de las calles y veredas de la Ciudad corren una gran cantidad de caños y cables que corresponden a los servicios de agua, gas, teléfono, electricidad y cable. Cuando algo se rompe, las empresas que prestan este servicio –Aysa, Metrogas, Edesur, Edenor, Telefónica, Telecom, o las empresas contratadas por ellas, entre otras- tienen que romper la vereda, lo que llamamos “apertura”, reparar y luego hacer el cierre como corresponde, esto es, nivelar y colocar las mismas baldosas que había antes.
Para que una empresa realice una apertura, ya sea en la vereda o en la calle, tiene que solicitar un permiso al gobierno porteño, de acuerdo con la Ley 2634.
En los casos en que las averías afecten a los vecinos, las empresas pueden comenzar los trabajos sin permiso previo, pero deben dar notificación al gobierno porteño dentro de las 48 horas de comenzadas las obras. Es lo que se llama permiso de emergencia, a diferencia del permiso programado. El problema es que no todas las empresas solicitan el permiso y luego no cierran como es debido.
En el caso de tratarse de un arreglo en la vereda, es la empresa quien debe cerrar la apertura, y en el caso de tratarse de una apertura en la calzada, la reparación corresponde al gobierno porteño. En este caso las empresas deben avisar que terminaron los trabajos para que se realice la pavimentación debida.
Plan de fiscalización y Control
Desde que comenzó a implementarse este plan de control los permisos solicitados por las empresas de servicio para realizar aperturas en la vía pública aumentaron en un 44%, así como también aumentaron los cumplimientos de cierre.
A partir del 2013 comenzó a funcionar en este rubro el sistema Saap, por medio del cual las empresas deben solicitar el permiso. Esto mejoró notablemente el control por parte del gobierno porteño.
A su vez se creó la nueva Dirección General de Fiscalización que cuenta con un cuerpo de 60 verificadores y 80 inspectores cuya principal función es controlar y multar a las empresas de servicios que no cumplan con la normativa.
Desde septiembre del 2013 a junio de este año se labraron 2636 actas y se produjeron 123 secuestros de herramientas a las empresas que al momento de la inspección no cumplían con los requisitos exigidos para este tipo de trabajos.
El arreglo de las veredas en la Ciudad de Buenos Aires, según la normativa, es responsabilidad del propietario frentista, a menos que el deterioro sea consecuencia de las raíces de los árboles o arreglo de luminarias, en ese caso es el gobierno quien debe intervenir, o de arreglos realizados por empresas de servicio. Es este último caso, es la empresa quien debe dejar la vereda en las mismas condiciones de las que se encontraba.
En cuanto a las aperturas en la calzada que realizan las empresas de servicio, deben ser derivadas al Ministerio de Ambiente, quien de encarga de cerrarlas.
Datos de las verificaciones:
Del total de los permisos solicitados por las empresas de servicio, el 80% de las aperturas se realizan en las veredas y sólo el 20% son trabajos en la calle.
Durante el primer cuatrimestre del año pasado se solicitaron 26.343 permisos y 37.991 durante el mismo período este año. Es decir, comparando ambos cuatrimestres, este año la solicitud de permisos por parte de las empresas aumentó en un 44%.
Entre las empresas que mayor cantidad de trabajos realizan en la vía pública, Edesur es la que afecta la mayor cantidad de superficie. Según las verificaciones realizadas, de enero a abril de este año esta empresa afectó 122.333 m2; lo sigue Edenor con 36.302 m2; Aysa con 16.203 m2 y por último Metrogas con 12.061 m2.
En un ranking comparativo por empresa, según las verificaciones, se resalta que Aysa es la empresa que en proporción mayor cantidad de aperturas cerradas a tiempo tiene, con un 81%, mientras que a la inversa Edenor es la empresa que tiene el menor porcentaje, al contar sólo con el 59%.
Permisos solicitados
Los permisos de aperturas que pueden requerir las empresas son de dos tipos:
Programados: cuando las tareas a desarrollar son previstas y proyectadas para hacerse dentro de un período.
De emergencia: actuación por fallas o averías que no admite demora porque causaría un perjuicio a los vecinos afectados. En estos casos la empresa no está obligada a pedir permiso previo, pero sí debe dar aviso dentro de las 48hs que comenzó a intervenir el lugar.
