Martes 08 de Julio de 2014

Ferias itinerantes, una alternativa para hacer las compras en cada barrio

Son 12 puntos en plazas y parques en los que se venden productos básicos de calidad y a precios accesibles.

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Las plazas y parques de Buenos Aires le ofrecen a los vecinos una buena alternativa para comprar productos de calidad y a buenos precios, en el marco de un espacio agradable y un trato amable. Las ferias itinerantes de abastecimiento barrial (FIAB) son 12 puntos móviles en los que se venden productos como frutas, verduras, carnes, huevos, pescados, lácteos y de panadería. Los 113 feriantes, nucleados en las 12 ferias, van rotando a diario más de 60 espacios verdes de la ciudad de Buenos Aires, de martes a domingo de 8 a 14.

Estas ferias funcionan desde 1990 con el objetivo de asegurar el abastecimiento de productos de la canasta familiar de buena calidad y a precios accesibles. Para ello, cada dos semanas se lleva adelante un acuerdo de precios sobre un listado de 30 productos de la canasta básica. El convenio se firma entre la Dirección General de Ferias y Mercados, dependiente del Ministerio de Ambiente y Espacio Público y los feriantes, y alcanza a frutas y verduras, pescados y mariscos, carne de pollo y huevos, lácteos y pan.

La Dirección de Ferias y Mercados está a cargo, además, del control de las habilitaciones, de bromatología y las condiciones de higiene de cada puesto. Los 113 feriantes cuentan con permisos de uso precario renovables anualmente, y deben acreditar sus obligaciones fiscales y previsionales.

Para obtener la autorización, se crea un registro de postulantes, que deben ser mayores de edad, argentinos o extranjeros con radicación en el país, constancia de inscripción ante la AFIP y libreta sanitaria nacional para expender alimentos.

Para encontrar la feria de tu barrio, hacé clic acá.

Feriantes y amigos

Los feriantes van rotando de barrio día tras día, de martes a domingo. Cada día se reúnen en un lugar diferente, al que los vecinos se acercan desde temprano para encontrar las ofertas de la semana. Como ya conocen a los feriantes desde hace años, muchos de ellos los llaman por sus nombres o incluso hacen los pedidos con anticipación por teléfono y después pasan a retirarlos por los puestos.

Este es el caso de Ana Mellino, quien junto con su hijo Antonio Fiorelli atiende un puesto de pescados y mariscos desde hace más de diez años en Parque Saavedra. “Somos feriantes de raza”, explica Ana, de 70 años, y agrega: “Mi hobby es estar con la gente. Hay que tener amor por el buen trato y conocer a los clientes. No es lo mismo una feria que un supermercado, donde sos un número”.

En la misma feria, Mario Chávez vende carne de cerdo y pollo desde hace más de 20 años, y los vecinos lo conocen como el “Rey del Pollo”. “La conformidad de la gente te empuja a estar encima del puesto, a levantarte a las 6 e ir de un lado a otro. A la gente le gustan los productos, y eso te deja satisfecho”, explica Chávez.

También los días jueves, en Delgado y Virrey Arredondo, en el barrio de Colegiales, funciona una feria itinerante. Dos de los feriantes, Miguel Ángel “Perico” Pereira, y Alejandro Meneces, son viejos conocidos del barrio. “Perico” vende frutas y verduras y, para acercarle las compras a los vecinos, da un servicio gratuito de reparto a domicilio.

En el puesto de Alejandro, quien junto a su familia vende productos de granja, se amontonan desde temprano los clientes y la cola se extiende varios metros sobre la reja de la Plaza de San Miguel de Caricoits. “Quiero que me lo prepare Alejandro”, pide una clienta que acaba de comprar distintos cortes de pollo.

Rosa Álvarez, una vecina de Colegiales de 72 años, saca a pasear a su perro y se acerca a la feria de la plaza como todos los jueves: “Hace cuatro años que vengo a comprar carnes y verduras, la mercadería es excelente”.

Fotos: Andrés Pérez Moreno / MAyEP